jueves, 22 de noviembre de 2007

Sta. Cecilia.

Feliz Día de Santa Cecilia, Patrona de la Música y de los músicos.
Cuando me haya ido, por favor, enciendan una vela a Sta. Cecilia y oren por mi alma..., si no lo hacen, volveré cada Día de Santos Difuntos, cada Día de Sta. Cecilia, cada Día de Juana de Arco y en cada solsticio de verano y en cada ocasión que se reúnan para tomar café a hacer de espíritu chocarrero, travieso y burlón...

viernes, 28 de septiembre de 2007

Muerte del colibrí.

Supongo que ya llevo muchos años escribiendo en páginas amarillentas y deterioradas por la vida. Esta es otra página más de eso que guardo como si fuese un libro de brujería... empastado artesanalmente y sin conocer las técnicas básicas del encuadernado. Estaba en una cafetería, el lugar que me inspiró a escribir en "Dal Segno" sobre los kefalitas y otros monstruos. Muchos pensarán que no soy sensible por la forma en que me veo; pero se equivocan, a veces siento que soy demasiado sensible... mas sin embargo, quisiera que la gente me valiera un rábano justo como se lo merece. La gente es mal agradecida. En el 2007, cuando escribí ésto, no pensaba que la gente fuera mal agradecida...

Ayer vi morir a un par de colibríes. Volaban en círculos, describían frases de pena y angustia en el aire. Pura mierda. Daban vueltas y vueltas tratando de apartar de sí a la muerte que se les avecinaba. Yo comía carne deshilada con verduras, bebía una soda de uva, sentado solo en ese lugar tan insípido como la comida misma.

Por fin, uno cayó a mi lado y lo tomé en mi mano. Sus ojos entrecerrados o entreabiertos me conmocionaron, sus plumas de colores me hicieron sentir nostalgia por la naturaleza... y no lloré, no, yo no lloro por una cosa tan insignificante como lo es un pajarillo más pequeño que la palma de mi mano... pero aún en su muerte, había belleza. Lo regresé a la Madre Tierra a la que pertenece, lo devolví a la Naturaleza a la que todos y todas volveremos...